Saltar al contenido

No hay lugar para el olvido: Memoria del caso Almería

Desde CNSV hemos lanzado la campaña #MemoriaCasoAlmería para visibilizar este terrible crimen contra tres jóvenes trabajadores que en 1981 viajaban desde Cantabria, y denunciar que ahora quieren dejar fuera de la Ley de Memoria Histórica Democrática autonómica a estas víctimas que el propio Parlamento declaró hace 3 años que debían obtener reconocimiento.
Resulta vergonzoso e inaceptable, ¿nos ayudáis a difundirlo haciendo RT y/o comentando sobre #MemoriaCasoAlmería?

https://www.elfaradio.com/2021/07/31/cantabria-no-se-vende-denuncia-que-el-gobierno-sacara-el-caso-almeria-de-la-ley-de-memoria-historica/

1 comentario en “No hay lugar para el olvido: Memoria del caso Almería

  1. Арсений

    Si, ya de entrada, nicamente fueron juzgad 008000 os tres de los once guardias civiles que participaron en los hechos que condujeron a la muerte de los tres j venes, la sentencia se situ en un punto medio entre la petici n del fiscal y las de las defensas al aceptar dentro de la calificaci n de homicidio las eximentes parciales de cumplimiento del deber (teniente coronel Castillo Quero) y obediencia debida (sus subordinados G mez Torres y Fern ndez Llamas). El juicio se cerr as en falso, por lo que los sentimientos de dolor, angustia e impotencia han anidado desde entonces en las familias de las v ctimas. De ah la certera afirmaci n del valiente periodista y profesor universitario, Antonio Ramos Espejo, de que el Caso Almer a es un caso cerrado para la Justicia y abierto para la Historia. La actuaci n de la Guardia Civil como instituci n dej mucho que desear a lo largo de todo el proceso. Su alineaci n con los encausados y condenados fue m s all del corporativismo y lleg al cuestionamiento de la honorabilidad de las v ctimas y al intento de deteriorar las relaciones entre las familias de los asesinados, lo que no consiguieron. La dilaci n en el cumplimiento de las sentencias, las condiciones en las que se desarrollaron e incluso la utilizaci n de fondos reservados son nicamente explicables a partir del deficiente desarrollo democr tico de las instituciones y el contexto pol tico de aquellos a os.

    Responder

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *