Ayer nos quedamos consternadas con la desgarradora noticia del asesinato de Eva y su bebé, de tan sólo once meses, en Liaño de Villarscusa. Se detuvo a su expareja en Astillero, como presunto responsable, tenía orden de alejamiento.
Esta mañana Cantabria condenaba este asesinato machista en la concentración organizada por la Comisión 8 de Marzo en Santander.
No ha pasado ni un día cuando se confirma otro asesinato de una mujer por parte de su pareja, este vez en Alicante.
La pesadilla no acaba nunca.
Según ha trascendido, el marido de Eva Jaular tenía condenas previas, y pese a que había contra él una orden de alejamiento, visitó el domicilio de la víctima (que llamó a la policía) hasta en dos ocasiones, en las horas previas al asesinato machista.
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Mientras nos siguen matando, mientras las medidas que se toman no se apliquen con rotundidad, seguiremos fallando como sociedad. No queremos seguir llorando más mujeres asesinadas por esta violencia machista. No podemos aceptarlo sin más. ¡Basta ya!
Ni una menos.